Jaycee Carroll se ha convertido por derecho propio en uno de los jugadores más carismáticos del Real Madrid de baloncesto. Bicampeón de la Euroliga, cinco veces ganador de la ACB y seis de la Copa del Rey, este norteamericano se ha distinguido como uno de los mejores tiradores de Europa en la última década. Su carrera está llena de éxitos, pero ahora debe afrontar una de las decisiones más complicadas.
A sus 38 años, Carroll se debate entre seguir jugando al baloncesto o quedarse en un rancho en Utah junto a toda su familia criando vacas Wagyu. El jugador, que ha hecho un gran colchón económico a lo largo de su carrera, siente que tiene gasolina en el tanque para una temporada más. Esa percepción la comparte un Real Madrid que está dispuesto a esperarle a que tome su decisión incluso empezando la temporada.
Esa decisión no es ni mucho menos fácil para un Jaycee que se tendría que separar de su mujer Baylee y de sus cuatro hijos. El escolta ya ha estado viviendo esta situación de separación de su familia en los últimos años, pero cada vez se le hace más complicado dejarlo todo atrás por el baloncesto. Los suyos le han visitado durante la temporada en fechas señaladas, pero no es nada fácil verse porque hay casi 24 horas de distancia entre la casa de los Carroll en Madrid y su rancho en Utah.
El deseo de la familia era que sus hijos se criasen en un entorno rural y por ello decidieron montar un negocio de vacas Wagyu en el Rancho River Meadow. Jaycee está conforme con que sus hijos se críen en la naturaleza y aprendan responsabilidades desde jóvenes. El jugador, al ser miembro fiel de la iglesia mormona, siempre ha ambicionado un tipo de vida muy diferente al que se lleva en Madrid. Además el negocio le va a las mil maravillas, como demuestra su web donde está todo agotado.
El club permanece atento a la situación de uno de sus jugadores de leyenda. Carroll tiene el respeto y cariño de todo el vestuario y por eso tiene un estatus especial su situación. De hecho, el entrenador Pablo Laso ni se ha planteado buscarle un sustituto esperando que Jaycee haga un último servicio. Las cartas están sobre la mesa: familia y Wagyu contra Real Madrid.